"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

¿Tarta Tren?


No se si os ha pasado a alguna de vosotras, que vais con dudas a preparar una receta que parece complicada y con asombro descubrís que os ha salido una obra de arte, y sin embargo otras, ves algo que parece súper fácil y al final os sale una chapucilla. Pues esto último es lo que me pasó a mí.

La primera vez que vi la tarta tren fue la de Oli de Entre Barrancos. Si algo tiene su blog, es lo bien explicado que tiene todo. Oli rescataba las fotos de una tarta tren que había hecho a su hijo cuando era pequeño, y contaba lo sencillo y divertido que era montarla. Es tan fácil decía que se puede pedir la colaboración de los niños.

A las pocas semanas me encontré por sorpresa la tarta tren que había hecho nuestra amiga Carmen de "Las Recetas de Tía Alia" la tenía publicada desde antes de que Nieves y yo visitásemos su blog por primera vez, pero la vi aparecer entre sus entradas populares, y al igual que Oli comentaba lo sencillo que era prepararla.


Las dos tartas eran infantiles, pero en mi cabeza estaba mi marido. Me hizo sonreir imaginarme su cara al ver una tarta así. En casa hay guardados como reliquias tornillos de vías, un trozo de carril, la gorra de un jefe de estación y hasta un farolillo rojo. Ya en una ocasión, con motivo de un aniversario, le llevé a "El vagón de Beni", un restaurante de Hoyo de Manzanares que es precisamente eso, un vagón de tren.

Evidentemente, aunque a Pepe le gusten los trenes, una tarta llena o hecha con "chuches" no tenía razón de ser, así que decidí preparar sólo la máquina, y hacer tanto la base como la propia máquina con bizcocho. Lo que no se me ocurrió pensar, es que el peso del bizcocho, haría que los donetes no soportasen el peso y se "desparramaran", los carriles hechos con kit-kat se hundieran  y los faros delanteros se cayeran. Y el utilizar una base de bizcocho pero cubierto con frosting de queso, la hiciese todavía más inestable. Fue toda una aventura intentar salvar la tarta metiendo unos cuantos palillos por los donetes y para sujetar una cabina que poco a poco se iba ladeando, pero todos nos reímos cuando apareció la tarta y vimos la cara que puso "el maquinista"

Para la tarta utilicé lo siguiente:

2 bizcochos de calabaza (uno de ellos con pepitas de chocolate)
1 tableta de chocolate Fondant
Pepitas de chocolate
Mermelada de higos
6 donetes blancos
Varias gominolas
1 regaliz en espiral
1 Tigretón
2 paquetes de KitKat
Fideos de chocolate
300 gr. de crema de queso ligth
150 gr. de azúcar glas
200 ml. de nata líquida de 35% de materia grasa
colorante azul y amarillo

Como quería unos bizcochos esponjosos y que tuviesen un corte colorido, los hice con calabaza asada. La receta es la misma que utilicé para el bizcocho de Halloween. Hice uno rectangular que sería para la base de la tarta y otro con un molde de plum cake para formar con él la máquina. Este último llevaba en su interior unas pepitas de chocolate.


Por otro lado preparé un frosting de queso. Para el frosting tenemos que mezclar la crema de queso con el azúcar glas con el robot de cocina e incorporar el colorante azul y amarillo para conseguir un tono verde.



y por otro lado montamos la nata, que tendremos bien fria, con las varillas eléctricas.


Mezclamos con cuidado la nata con la mezcla de queso y dejamos 1/2 hora en el frigorífico para que coja más consistencia.



Al bizcocho que me sirvió de base, lo corté por la mitad (yo utilizo el cuchillo de cortar pan) y lo rellené con un sirope hecho con mermelada de higos (yo lo hice poniendo 3 partes de mermelada por una de agua y calentándolo en un cazo). 


Cuando ya tuve montada la base con su relleno, la cubrí toda con el frosting de queso y la reservé en el frigorífico mientras empezaba mi odisea con la maquina. Para ello empecé a dar forma al bizcocho que había hecho con el molde de plum cake. Como mi molde es de silicona, tiende a ensancharse por el centro, por lo que tuve que cortar los laterales. También corté un tercio del bizcocho, dejando el trozo más grande para la máquina, y el más pequeño para la cabina. Hasta aquí podemos decir que había realizado la parte sencilla. 

Fundí la tableta de chocolate fondant en el microondas. La cabina la pegué con un poco de chocolate a la máquina y empecé a cubrirla toda con el chocolate. Mientras se iba solidificando empecé a formar la vía con los Kit-Kat. Poco a poco se me iba echando el tiempo encima.....


Tic Tac, recorta el chocolate que ha chorreado, Tic Tac, esparce fideos de chocolate para formar la gravilla de la vía, Tic Tac corta medio tigretón para que haga las veces de chimenea, Tic tac ahora pegamos con chocolate seis donetes para que hagan de ruedas, Tic Tac con unas gominolas amarillas hacemos los faros delanteros, con dos gominolas rojas los faros traseros, con un regaliz en espiral el farolillo rojo, Tic Tac la maldita cámara se ha quedado sin batería, Tic Tac cogemos la máquina con cuidado y la depositamos en la base y.................grr pffz chsss

La máquina se hunde en el frosting de chocolate, las ruedas delanteras se desparraman, la cabina se empieza a ir hacia atrás y los faros delanteros caen a plomo. Ringgggg, suena el telefonillo, los primeros invitados van a empezar a llegar... Pepe no entres en la cocina.... Por favor necesito unos minutos.... Unos palillos por aquí para sujetar dos nuevos donetes (los anteriores habían quedado completamente verdes), otros para sujetar la cabina y al frigorífico mientras merendamos y que sea lo que Dios quiera.



¯¯Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz.....¯¯


Bon Appétit
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